Erich Fromm se plantea esta pregunta en su famoso libro “El Arte de Amar”(1956). Vamos a hacer un seguimiento de sus reflexiones para acercarnos un poco más al entendimiento de la palabra amor.
Erich Fromm considera el amor un arte que requiere conocimiento y esfuerzo. Nos explica que la mayoría de la gente cree en el amor como una sensación placentera y cae en el error de suponer que no hay nada que aprender sobre el amor. Los motivos que les llevan a esa suposición son varios:
- Por una parte consideran que el problema del amor consiste en ser amado y no en amar, valorando aspectos como el éxito, ser poderoso, rico, ser atractivos, en definitiva, una mezcla de popularidad y sex-appeal.
- Por otra, el hecho de creer que amar es fácil y lo difícil es encontrar a quien amar, la importancia del objeto frente a la de la función, la suposición de que el problema del amor es el de un objeto y no de una facultad.
- Y la confusión entre la sensación inicial del enamorarse y el permanecer enamorado cuando la otra persona ya no es desconocida y se pierde el halo de misterio inicial.
Fromm afirma que las relaciones amorosas humanas siguen el mismo esquema existente en el mercado de bienes y de trabajo, en la idea de un intercambio mutuamente favorable. “Una mujer o un hombre atractivos son los premios que se quiere conseguir”. El amor es la respuesta al problema de la existencia humana; visto de una manera más cuadrática es un arte y como todo arte, tiene características comunes y una práctica que aprender.
Amar es una experiencia personal que nadie puede hacer por nosotros ni enseñarnos a realizar. Como todo arte tiene unas condiciones generales que deben ser atendidas:
- Una de ellas es la disciplina durante toda la vida.
- Otra condición es la concentración, si no nunca lograremos aprender el arte, ni éste, ni ninguno.
- La paciencia, ya que rápidamente no conseguiremos nada. La preocupación máxima por el arte y por llegar a ser maestros en él.
- Y por último, debemos tener el deseo de aprenderlo.
Si alcanzamos a comprender y poner en práctica estas premisas seremos capaces de amar. No amamos aquello que no cuidamos.
Sí, amar sigue siendo un arte 56 años después del libro del psicoanalista Erich Fromm.
Milagros Núñez
Psicoterapeuta de Pareja y Sexualidad